Al director del coro. En sheminit. Salmo de David.

 

¡Salva, oh YHVH, porque se han acabado los piadosos!

Porque han desaparecido los leales entre los hijos del hombre.

Hablan falsedades, cada uno a su prójimo,

Hablan con labios lisonjeros y doblez de corazón.

¡Corte YHVH todo labio lisonjero,

Y la lengua que habla altanerías!

A los que dicen:

Haremos poderosa a nuestra lengua,

Nuestros labios están con nosotros,

¿Quién es señor sobre nosotros?

Por la opresión de los pobres,

Por el gemido del menesteroso,

Ahora me levantaré, dice YHVH.

Pondré en seguridad a los que son escarnecidos.

Las palabras de YHVH son palabras puras,

Como plata refinada en un crisol en la tierra,

Purificada siete veces.

Tú los guardarás, oh YHVH,

Nos preservarás de esta generación para siempre.

8 Por todos lados deambulan los malvados,

Cuando la vileza es exaltada entre los hijos del hombre.

 


12.1 sheminit... Esto es, octava menor.