Lc 22.31. La frase Satanás os reclamó para zarandearos como a trigo, exhibe el sentido de exigencia (más que de petición o solicitud) para una prueba (Job 1 ss.) que claramente es aludida por Jesús. El diablo es el anti-Mesías que zarandea el trigo, en su derecho de exhibir la maldad en los hombres y demandar así su culpabilidad ante la justicia divina. Como autoridad celestial, y también como instrumento de detección ética, el diablo juega el papel del acusador (Zac 3.1 ss.; 1Ti 3.6).