Gn 2.21-22. El uso más crucial del vocablo hebreo sela es, por supuesto, el que explica el origen de la mujer. Que Dios haya tomado abundante porción de Adam, se deduce de la estimación hueso de sus huesos y carne de su carne, que sin duda motivó la traducción costilla. Sin embargo, en su primera acepción, el vocablo sela solo refiere al costado del hombre, o a la ladera de una colina (2S 16.13), o a los lados de un objeto (Ex 25.12, 14), o a la ubicación de muebles (Ex 26.35) o inmuebles (1R 6.5; Ez 41.6; 1R 6.15), y debe distinguirse de ala, definición específica para costilla (Dn 7.5). El registro de la LXX (gr. pleuron) tiene el mismo significado (Gn 2.21; 1R 7.9, 40; 8.19; Ez 41.7, 8, 9).

 Abreviaciones