Jn 4.23 verdaderos adoradores... Ro 12.1-2 adoración verdadera... Primeramente, es importante entender que las acciones de adoración del Viejo Pacto se limitaban a simples actos de prosternación. Es a partir de Pentecostés cuando los hijos tienen entrada a una nueva dimensión que les permite ahora adorar a Dios en espíritu y verdad (Jn 4.20-24). Pablo explica al creyente estas enigmáticas palabras de Jesús (Jn 4.20-24) como una práctica de adoración cristiana. En este caso, el vocablo gr. latreian constituye una terminología análoga al cristianismo primitivo, íntimamente relacionada con el nuevo nacimiento, que el apóstol describe como un logiké latreía, es decir, una adoración razonable, la cual, por la consubstancialidad que el creyente tiene con Dios, puede y debe manifestarse en un estado de adoración permanente. La riqueza de esta logiké latreía, definitivamente, debe distinguirse de la pobreza culterana de la treskeía = religión (Col 2.18-23).